El perdón en el Nuevo Testamento
Dios es misericordioso y perdonarse los unos a los otros se considera un imperativo moral, pues el perdón a quienes nos ofenden y nos odian es uno de los mayores ejemplos de amor al prójimo; las referencias al perdón entre los hombres abundan en el Nuevo Testamento, que recomienda poner la otra mejilla y amar a nuestros enemigos:
Jesús recomendó perdonar «setenta veces siete» (Mateo 18:22), es decir, no cansarse de perdonar.
Rembrandt – “El Regreso del Hijo pródigo»
La Parábola del hijo pródigo enseña las diferencias del perdón entre los seres humanos y su analogía con Dios como perdonador, para quienes buscan de su perdón.7
Iglesia católica
Santo Tomás de Aquino, impresionado con la oración a menudo por él mencionada y que es la oratio de la misa del X domingo después de Pentecostés, que dice:»Deus qui omnipotentiam tuam parcendo maxime manifestas» «Oh Dios que manifiestas tu omnipotencia sobre todo por el perdón…»), afirma que «el perdón de Dios configura un poder superior al hecho de crear los cielos y la tierra».
Las oraciones más importantes para el cristianismo, el «Kyrie Eleison», el «Credo» de la Iglesia católica y el tradicional «Padrenuestro» mencionan el perdón de las ofensas y de los pecados. En el «Credo» se dice, hacia el final: «Confieso que hay un solo bautismo para el perdón de los pecados».
En el Padrenuestro se recogen estas palabras: perdona nuestras ofensas como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden.
El pecado es una ofensa a Dios, que por tanto también tiene algo que perdonar, a través del sacramento de la confesión o penitencia. A través de los sacerdotes se obtiene el perdón divino por medio de la llamada «absolución». La Iglesia católica sostiene esta capacidad del sacerdote en las palabras que el evangelio pone en boca de Jesús: «Recibid el Espíritu Santo. A quienes perdonéis los pecados, les quedan perdonados. A quienes se los retengáis les quedan retenidos» (Jn 20, 23).
La Biblia destaca mucho más como obligación religiosa perdonar que pedir perdón.